Comienza el Décimo Octavo Período de Mandato de las Asambleas Municipales del Popular y el ambiente que circunda al país continúa tenso, pues las causas que lo originan no se han modificado. El bloqueo es un hecho concreto y sus efectos múltiples se sostienen en el tiempo, de ahí que las autoridades tienden articular los esfuerzos para avanzar en los objetivos con creatividad, pensar en el carácter inconstitucional del trabajo en la base, vital para éxitos despojados de falsos triunfalismo, con transparencia y sin pausa.
Son tiempos que el esfuerzo va de la mano junto con la eficiencia, por lo tanto debemos re aprender a hacer eficientes que no siempre es hacer más con menos, sino emplear en cada actividad los recursos planificados, es hacer buen uso del presupuesto hasta las estructuras que lo controlan, buscando que en cada puesto estén los mejores, los más comprometidos y honestos.
Es incuestionable que tenemos reservas para continuar, y la mejor divisa que es el Capital Humano, por lo tanto corresponde enamorarse de modos y actuación dinámicos descentralizado participativos. La corresponsabilidad nos llevará a mejores estándares de calidad revertida en bienestar para el pueblo, de ahí que organizarnos no es una opción más, sino la única posible para ganar confianza en el sistema de gobierno.
Los delegados del Poder Popular en cada circunscripción y Consejo Popular, deben andar en cuadro apretado y complementándose en su demarcación, como lo requiere el acompañamiento espiritual, mejor aleado de la legalidad, uno de los tópicos más cuestionados por estos días.
Las reuniones articuladas en la transformación digital y un dedicado proceso de comunicación social deberán arrojar resultados viables y nuevas metas. El rol de la ciencia junto a la empatía, el buen carácter y el compromiso serán variable de valor en nuestro empeño de seguir contribuyendo una sociedad más próspera con Todos y por el bien de Todos.