A 38 kilómetros de la cabecera provincial de Guantánamo, se encuentra Hatibonico, un asentamiento del municipio Caimanera, que en su diario hacer, demuestra una notable resiliencia ante las adversidades que enfrenta, y así, con ese espíritu de unidad y colaboración que caracteriza a quienes habitan la también llamada comunidad de Los Monitongos, los lugareños se preparan para hacer del 2025 un año de transformación y progreso.
Walter Céspedes, quien hace mas de 40 años reside en la también comunidad de Los Monitongos con mucho argullo dijo a Radio Bahía: “El año que recién termina fue un periodo de resiliencia, consagración y mucho sacrificio para los hatiboniquenses, elementos ante los cuales nos proponemos un mejor dos mil 25, periodo en el que debe mejorar la vida en la comunidad, por ejemplo ya se tiene entre los planes y proyectos de la educación municipal la implementación en esta comunidad de convertir la escuela primaria Jose Tey, un centro mixto, cuando eso suceda, los pioneros en edades comprendidas de preuniversitario y secundaria básica ya no tendrán que viajar a la cabecera municipal para continuar sus estudios”.
Fidel ve como un sueño los avances que se realizan en la parte de la agricultura con el rescate de la finca de la comunidad: “Lo que a futuro debe mejorar la alimentación en Hatibonico como fue hace muchos años, y cuando eso se logre hay que seguir batallando para que los precios bajen como parte de ese llamado que hace la dirección del país, y para lograr eso los hatiboniquenses nos proponemos en este 2025 aportar, sembrar, crear autoconsumo, como hace años lo logró Sixto Batista con la creación del porcino, la nave avícola, la cooperativa pesquera, y eso hay que reactivarlo como parte fundamental del desarrollo de la comunidad”
Entre los desafíos y limitaciones económicas de este año que casi termina, los hatiboniquenses, muestran una determinación admirable para mejorar su calidad de vida.
Roilan Basulto, delegado de la circunscripción 31: “Hatibonico, asentamiento caimanerenses en dos mil 24 logró un pedido de mucho años de los electores, como lo es la casita infantil “Florecitas nacientes”, se inauguró nuevo pozo lo que permitió bajar el ciclo de distribución a dos días, se entregaron más de diez vivienda a moradores de la comunidad, con atención especial las madres con más de tres hijos menores de 17 años.
Yaumara Guerrero es una de esas madres que fueron beneficiadas por la política demográfica, y como tal lo reconoce: “Además con el aporte de los trabajadores de la mini-industria, con la producción de algunos materiales, áridos, bloques, entre otros y ello fue un pilar fundamental en la construcción de viviendas que este año tuvo además como avance las construcciones mixtas, como la casita que me entregó el Gobierno”.
Hatibonico, asentamiento caimanerense limítrofe con la ilegal base naval enclavada en contra del pueblo cubano en suelo patrio, es un ejemplo inspirador de cómo una comunidad puede levantarse ante las adversidades, con un enfoque en la colaboración, el desarrollo sostenible y el bienestar colectivo, sus residentes están decididos a hacer del 2025 un año positivo.