Ponerle Manos y Corazón a Cuba desde el trabajo y la creativa es una de las razones que anima al cayamense, apicultor y destacado productor de miel Abel Pérez Herrera, para quien contribuir a la Implementación de la Ley 148 de Soberanía, Seguridad Alimentaria y Educación Nutricional es lo primordial.
Confiesa que más de cincuenta, de sus 65 de vida, lo ha compartido con las abejas, y así lo atestiguan los cientos de picadas que tiene en sus manos, y resto de su anatomía.
Resulta impresionante conversar con Abel, más aún recorrer sus colmenas y apiarios, ver como hace gala de la paciencia que requiere obtener una miel natural, completamente libre de sustancias químicas, por ello sostiene el criterio y la convicción, de que a pesar de su autodidacta formación como Apicultor, las buenas prácticas en el manejo de las colmenas son lo esencial para alcanzar rendimientos óptimos: “En lo que a la apicultura se refiere, se impone, por ejemplo, cambiar de reina cada cierto tiempo, y aunque acorta el ciclo de vida de las abejas reinas, se logra más productividad”.
Este destacado productor del municipio de Caimanera, confiesa que hace años aporta altos niveles de miel ecológica, que se vende en el mercado internacional a buen precio, y eso lo satisface, porque con ello ayuda a la economía de su país.